En el embarazo espiritual experimentarán una serie de cambios internos, estos se producirán en el alma o sea en las emociones. Algunos de ellos también se sentirán en el cuerpo físico, trayéndoles malestar y pesadez, ya que están asociados directamente con el embarazo energético.
Algunos síntomas ustedes los tomarán en forma normal, pero otros no, estos últimos les estará indicando que el embarazo está siendo difícil para ustedes, debido a que están lidiando con las emociones y éstas no son fáciles de confrontar.
El Ser tendrá molestias físicas y psíquicas en los tres primeros meses (Realidad Primaria) del embarazo-espiritual.
Debido al Bing-Bang del Despertar de Consciencia y a la Concepción de su Bebé-Espíritu en la Glándula Pineal, ustedes se sentirán raros, extraños e incómodos. El primer síntoma en el embarazo, es perder el ciclo menstrual. ¿Cómo podríamos comparar la pérdida del ciclo menstrual, con el embarazo del Bebé-Espíritu? La sangre representa: La Vida material y es la vida material la que el espíritu va a aprender, a…Renunciar.
El Despertar de la Consciencia trae consigo, remover el agua estancada del subconsciente, donde se encuentran las emociones más difíciles de erradicar y trabajar, son aquellas enquistadas en lo más profundo del alma, cuyas revelaciones íntimas, ustedes no quieren ver, sentir, ni escuchar.
Por este motivo se encontrarán en situaciones desagradables, donde aflorará algunas verdades incómodas, como los dolores del ciclo menstrual, que ustedes no quieren confrontar.
Enfrentar verdades reveladas, dichas o insinuadas, les producirá síntomas dolorosos y digestivos en el físico y en la psiquis, no muy agradables para el sentir del alma. En la activación de este proceso, los malestares psíquicos y la limpieza del alma producirá en ustedes:
Dolores musculares, dolores de cabeza, sueño, cansancio, desgana, tristeza, mal genio etc. Los síntomas del embarazo-espiritual están claros, solo les queda detectarlos, entenderlos y trabajarlos. Como la Glándula Pineal es el útero donde se gesta el Bebé-Espíritu, los pensamientos más elevados del ser, envuelven al bebé, cuidándolo de cualquier interferencia.
Por efecto del Despertar de Consciencia y por la limpieza de las emociones-negativas-enfermas, las energías-pensamientos (alma) comienzan a rechazar todo lo negativo que pueda afectar al Bebé-Espíritu.
Alrededor de la Glándula Pineal se forma un campo energético, el cual proveerá y nutrirá de todo lo necesario al bebé. Así como la progesterona, inhibe las contracciones del útero, la Energía inhibirá cualquier interferencia que pueda afectar a la Glándula Pineal.
Es conveniente en este período del embarazo, que la alimentación del Bebé-Espíritu sea sofisticada y muy nutritiva.
Así como la madre se alimenta correctamente de todo lo que nutre a su bebé, la nutrición correcta para el Bebé-Espíritu son pensamientos de un alto contenido proteico, o sea, el ser debe nutrirse de conocimientos elevados, cósmicos y universales, así su bebé, crecerá fuerte, sano y energético.
Podrá pasar por sufrimientos psíquicos.
Debido al crecimiento mental y a la nutrición de energías-pensamientos de alto contenido proteico, el Ser podrá tener: Sobre-alimentación psíquica, trayéndole confusión, sufrimiento, stress, incomodidad, malestares etc. En este período, el Ser podrá combatir estos síntomas a través del Entendimiento.
Deberá ayudarse con ejercicios de relajación: Yoga, Meditación, Respiración, Lectura, Trabajo en grupo etc. De esta forma relajará su mente y sentirá que su alma se tranquiliza. La alimentación energética del ser, deberá ser controlada. Queremos decir que no debe alimentarse, comiendo todo conocimiento que llegue a él o nutrirse de absolutamente de todo lo que llega a sus manos, esto le producirá una indigestión tremenda.
De esta forma el Bebé-Espíritu será sobrealimentado, engordándolo solamente, pero no nutriéndolo adecuadamente. En este período el ser debe comprender que ya se alimentó lo suficiente y que de ahora en adelante, él deberá distribuir la alimentación de acuerdo a la necesidad de su bebé-espíritu. Mejor dicho, debe convertirse en un ser selectivo y no comer por comer, sino nutrirse con lo mejor de esa alimentación.
El Ser tendrá una necesidad muy fuerte de hablar sobre temas espirituales.
Esta es la incontinencia que el Ser sufre en el embarazo-espiritual. Querer hablar y hablar de temas espirituales. Sentir que si no lo hace, no se siente que está en el camino correcto. Desear fervientemente que todos los seres al igual que él, se encuentren en el Despertar de la Consciencia.
Tratar de convencer a como dé lugar de que el camino correcto es el que él está recorriendo. Que sus amigos y parientes lo comprendan y lo entiendan. Pertenecer a muchos grupos de estudio. Asistir a mil conferencias y leer y escuchar todo lo que cae en sus manos. Si la Incontinencia no pasa, entonces deberá tranquilizarse, meditar y tratar de entender que todos están en el camino, solo que unos son rápidos y otros más lentos... La incontinencia espiritual es: Querer dejar su marca-espiritual por donde pasa.
Tener insomnio psíquico.
Evitar las exageraciones y reemplazarlas por la Paz y la Armonía. Combatir los excesos en el camino espiritual. El universo no les pide grandes misiones, en lo pequeño que les tocó vivir, deben hacerlo lo mejor que puedan.
Las exageraciones espirituales traerá: falta de sueño, malestar, cansancio, debilidad, impotencia, incapacidad etc. Todo esto redundará en debilitar y desproveer, los cuidados energéticos que el bebé-espiritual necesita.
Tienen que cuidar mucho el cuerpo físico haciendo ejercicios y manteniéndose sanos, bien alimentados y equilibrados para que la vida material y psíquica no se vea afectada... Preocuparse y preguntarse constantemente, si lo que está haciendo es suficiente para su elevación espiritual.
El crecimiento espiritual del Bebé-Espíritu es diferente de ser a ser. Muchos de ustedes piensan que la cantidad-espiritual hará que ustedes eleven y se preparen mejor que los otros, entonces hacen un esfuerzo sobre humano, pensando que con ello conseguirán la meta. No es así, el camino espiritual no es de Cantidad es de Calidad.
Nutran a su Bebé–Espíritu lo mejor que puedan, pero sin exagerar, sin extralimitar, háganlo con consciencia, voluntad, constancia, entendimiento, amor y con el Deseo Creador que es el transmutador de todo lo existente. Nutrir al Bebé-Espíritu exageradamente les traerá sobre peso mental y eso no es bueno ni para ustedes, ni para el bebé.
Queremos decir, que no necesitan corren atrás de miles de formas, personas, conocimientos, libros etc. creyendo que de esa manera serán más “Espirituales” no es cierto. Deben conseguir la paz interior y gestar a su bebé lo mejor que puedan con lo necesario y estrictamente dirigido al trabajo interior.
Exagerar en el cúmulo de información.
Es cierto que el bebé-espíritu necesita ser nutrido de los mejores y elevados pensamientos. Ustedes se preguntarán ¿Cómo lo voy a nutrir? - ¿Cuál será la enseñanza más adecuada para él? – ¿Será de algún Maestro Ascendido, o de una Canalización? - ¿De alguna transmisión extraterrestre? - ¿Cuál será la mejor nutrición que mi Bebé-Espíritu necesita?
El Bebé-Espíritu no necesita de tal o cual enseñanza determinada, o que ustedes lo nutran fanáticamente de una sola, pensando que es la correcta y única, de esta manera no le están permitiendo nutrirse de otros alimentos.
La nutrición perfecta para el Bebé-Espíritu, es de todo un poco. Como la madre en el embarazo se alimenta variadamente para darle al bebé sales, minerales, aminoácidos, calcio y más, así el Bebé-Espíritu necesita variedad de energías-pensamientos. Significa que el Ser deberá nutrirlo de otros conocimientos cósmicos, por ejemplo: Conferencias, libros diversos, canalizaciones de diferentes planos y dimensiones, escuchar a los Maestros Ascendidos con mente abierta, trabajar con grupos alternados etc.
Todo alimento positivo que nutra al Bebé-Espíritu es bienvenido, porque así él absorberá un sinfín de energías-pensamientos universales y no se estancará en su desarrollo cósmico. Pero no deben exagerar, la cantidad de alimento energético les traerá obesidad, tanta, que al final se sentirán que no pueden caminar espiritualmente, ya que la gordura mental, los paralizará y les quitará la ligereza en el pensar.
El Ser siente un enorme peso en el alma.
Cuanto más se sabe, más es el contenido de la responsabilidad y el peso de la Consciencia. A esta altura del embarazo del Bebé-Espíritu, el Ser se siente inmenso, colosal y gigantesco, esto se debe al aumento que obtuvo de Conocimiento, Entendimiento y Amor adquirido.
Sus energías-pensamientos engrandecieron su alma y esta se siente unida al universo, al cosmos de sabiduría. Todo el conocimiento y el cúmulo de energías-pensamientos, están nutriendo a su Bebé-Espíritu y el Ser siente dentro de sí la unión espiritual con el creador.
La cantidad de información acumulada en el cerebro del Ser, le puede ocasionar pesadez, intranquilidad, falta de sueño, incomodidad e indigestión mental. Estos síntomas se pueden contrarrestar, asimilando del conocimiento lo estrictamente necesario, nuevo y útil.
Así la gordura innecesaria del conocimiento bajaría a la mitad, de esta manera el Ser se sentirá más leve cargando el embarazo de su Bebé-Espíritu.
El Ser que se encuentra embarazado de su Bebé-Espíritu puede sentirse superior de aquellos que aún no han concebido.
Puede aparecer picazón en el alma, debido al orgullo, soberbia y ego de sentirse que él llegó y los otros no. Esta picazón puede ocasionar erupciones energéticas en el alma, o sea, ciertas manchas que pueden desaparecer a través del entendimiento y el trabajo interior, o esas manchas se volverán crónicas, marcando en el Ser retrocesos energéticos, los cuales no le hace nada bien al Bebé-Espíritu.
Las manchas son las emociones-negativas-enfermas que no los están dejando nutrir correctamente a su bebé, haciendo que ellas se conviertan en un peso incómodo que se colocará en la espalda, transformando el embarazó en una carga de responsabilidades, deberes y más.
Significa que el Ser no hace su trabajo espiritual con alegría, si no como una obligación impuesta por su embarazo. En estas condiciones, su caminar en el sendero espiritual, no es: Ligero, suave, alegre, es por el contrario: Rígido e incómodo, molestia que la sentirá sobre todo en las piernas del alma, las cuales no responden, no lo ayudan, convirtiendo su caminar en una carga dolorosa y molesta.
Los sentidos Externos se agudizan.
El embarazo material agudiza los sentidos externos, el olfato, el gusto, el oído etc. Y es debido al flujo mayor de hormonas. En el embarazo del Bebé-Espíritu, el Ser tiende a agudizar los sentidos internos y esto se debe al mayor flujo de energías-pensamientos-positivas que activan los sentidos internos como: La percepción, intuición, sensibilidad, adivinación, captación etc.
La temperatura aumenta en este período especial.
Así como la temperatura corporal tiende a aumentar debido a la progesterona, la temperatura en el alma podríamos compararla a la frecuencia y vibración, las cuales elevan el ritmo frecuencial y eso permite que las energías-pensamientos se muevan aceleradamente permitiendo que el Conocimiento, Entendimiento y Amor se desplacen aceleradamente en el electromagnetismo de sí mismo, en los demás y en el entorno.
Cuanta mayor cantidad de energías-pensamientos vibren en frecuencias altas, el electromagnetismo personal y del planeta también, acelerará su frecuencia y vibración.
Es posible que el Ser sienta que su Sistema Digestivo no está funcionando normalmente.
Muchas veces el embarazo material trae consigo desórdenes digestivos y eso se debe a la progesterona, hormona que regulariza el tracto intestinal, pero evacuada en grandes cantidades da como resultado lo contrario. Esto mismo sucede en el Ser que está gestando a su Bebé-Espíritu.
Como el Ser está trabajando constantemente sus emociones-negativas-enfermas, éstas tienden a ser eliminadas por el sistema digestivo cerebral, el cual al mismo tiempo, las excluye por el tracto intestinal del cuerpo material, produciendo malestares como diarrea, cólicos y flatulencia.
Estos son los síntomas del embarazo espiritual. Cada Ser los sentirá individualmente y deberá comprenderlos para que la Concepción de su Espíritu se convierta en una realización extraordinaria de Paz, Armonía y Amor. La aceptación de la Naturaleza Espiritual es importantísima en el proceso de gestación.
Cuando el Ser desea fervientemente concebir su espíritu, el trayecto del embarazo se convierte en un sentir maravilloso, que lo transportará a lo más elevado de la existencia..